“El enfant terrible de la moda” anuncia el pasado viernes que abandona el barco de las pasarelas. Jean Paul Gaultier, un icono dentro del mundo de la moda rebelde, el rey de darle un giro a todo lo que se considere esperado o clásico en la alta costura, se despide de una larga carrera que dura 50 años.
El diseñador, usando el gran sentido del humor que le caracteriza, publica un video en Instagram en el que simula mantener una conversación telefónica con un amigo y le cuenta que este miércoles durante la Semana de la Moda en París, tendrá lugar en el Teatro Châtelet el desfile de su colección otoño-invierno 2021, con la que pondrá el broche al final a su carrera, y celebrará también su 50 aniversario en este mundo.
Ya desde pequeñito comenzaba a mostrar su gusto por la moda cosiendo ropa para su osito de peluche, hasta que a los 18 comienza a trabajar como asistente para uno de los grandes, Pierre Cardin. Pocos años después crea su propia firma, y desde ahí los éxitos comienzan a sucederse. Trabajó también con la firma Hermés hasta 2004, y a partir de 2011 la empresa española de moda y perfumes Puig se convierte en la principal propietaria de la firma de Gaultier siendo su principal accionista.
Para él, la moda es espectáculo, creatividad, salirse del canon de lo clásico y convencional. Siempre le gustó mezclar culturas y géneros, y hacer de lo raro algo especial y llamativo. Así, tanto él como sus creaciones se introdujeron en el mundo de la música y el cine.
Reinventó el corsé que antiguamente iba asociado a la opresión de la mujer, diseñando uno para Madonna reconocido en todo el mundo por el sujetador en forma de conos, consiguiendo así una imagen de rebeldía y liberación. Otras de sus famosas creaciones por las que es aclamado son la falda escocesa para hombre y la reconocida camiseta de rayas marinera, con la que es habitual verle. De esta última afirma haberla creado como homenaje a su abuela quien siempre le vestía de azul.
Además de a Madonna, ha vestido y trabajado con Lady gaga, Marilyn Manson y Myléne Farmer. Del mismo modo, su huella queda grabada en el cine vistiendo a muchos de los protagonistas de películas como El quinto elemento, de Luc Besson; El cocinero, el ladrón, su mujer y su amante de Peter Greenaway; La ciudad de los niños perdidos, de Marc Caro y Jean Pierre Jeunet; y Kika, La mala educación y La piel que habito de Pedro Almodóvar.
Incansable y con ganas de más espectáculo y emociones, montó el Fashion Freak Show, un cabaret protagonizado por personajes estrafalarios sacados de su imaginación con Rossy de Palma y Dita Von Teese como actrices principales. Bajo el lema “Le freak c’est chic” el show triunfó y lo sigue haciendo.
Las pasarelas se ven obligadas a despedirse nostálgicamente de uno de sus iconos, sin embargo el mismo Gaultier afirma que no todo acaba aquí, él mismo afirma: "La casa de costura Gaultier París continúa, con un nuevo proyecto del que soy el instigador y que será revelado próximamente".
Así, pese a que lamentamos no volver a verlo desfilar deseamos que esto no sea un completo adiós, sino un hasta pronto de una de las figuras y mentes que más han influenciado el mundo ya no solo de la moda, si no del arte a lo largo de la historia.
